"Si lo quieres, no lo pierdas"

        “Lo que más quiero de este mundo”. Levántate de la cama y tómate una pastilla para la resaca que tienes. Tantos cubatas que ni recuerdas lo que prometes. Hablas mucho, mientes el doble. Lo bueno se acaba y pides más de lo que mereces. ¿Te das cuenta?. Abre los ojos. Muchas a las que abrazar, y otros con los que pasar un finde. “Te quiero”, ¿en serio?. Ni tú sabes lo que quieres. Una calada detrás de otra. Se te olvidan las prioridades. 

        Piénsalo: abrazos por la calle, mañanas en garajes. ¿Confianza? Como mi hermano, ya lo sabes. ¿Se te olvida? De lo mejor que me ha podido pasar en la vida. ¿Quieres ser mayor, no?. Respira. Acuérdate de todo, lee mensajes. Ocho y media, menos tres. Daba igual de que fuera la clase. Anillos hechos con humo. Donde sea y cuando sea, mientras sea al lado tuyo. Nueve de la noche, domingo. Llamadas de diez segundos para saber cómo has dormido. Estoy mal, "¿a quien hay que pegar, cielo?". Estallar a carcajadas, contigo nada me da miedo. ¿Enfadados, cuánto? ¿Medio día?. Llamadas interminables, ¿contigo? toda la vida. Era bonito, ¿eh?. Pero esto ya no lo haces. Encerrarme en un baño hasta que hiciésemos las paces. Un verano sin hablar, cada día te echaba más de menos. De las pocas personas que saben todos mis secretos. ¿Me dan a elegir? Sabes que eres el primero. Casi venticuatro meses. Guardo hasta el primer recuerdo. ¿Y las ganas de llorar? Contigo se me pasaban. Sentados en Ópera, diciéndome quien te gustaba. Abril de dos mil once, terraza, cámara y cerveza. Un viernes volviendo a casa. “En media hora soy quien te besa”. 

       Desayunos en tu casa justo antes de ir a clase. Cuando estaba contigo quería que el tiempo se parase. ¿Estais juntos? Me reía. Estaba claro, no entendían “No es tonteo, es cariño”. ¿Qué quieres? –mejor amigo ¿Qué pasa, no te das cuenta? El tiempo pasa. Nada es para siempre/nada es eterno. 

       ¿Y entonces, que propones? ¿Cada uno por su lado? ¿Hacer que no me conoces?. Te lo dije, y yo no miento: “para siempre”. De nada me arrepiento. Coges el camino fácil y dices que nada te importa. Quizá sea inconsciente, pero la atención que pones es poca. Y te entiendo, vives deprisa. Hoy aquí, mañana allí. Lunes, Domingo. Te lo tomas a risa. ¿Te acuerdas? De verdad hay pocos, y no todos merecen la pena. Un consejo: “si los quieres, no los pierdas"